ACCIDENTES DE TRABAJO: SUS CAUSAS
En el desarrollo de sus actividades laborales, o con ocasión de ellas, los trabajadores se encuentran expuestos a diversos riesgos que pueden ocasionar accidentes de trabajo. Los empleadores, por lo tanto, tienen el imperativo económico, legal y moral de implementar medidas de seguridad que prevengan la ocurrencia de tales eventos.
Cuando se habla de seguridad en el trabajo se hace referencia al conjunto de técnicas y procedimientos que tienen por objeto identificar evaluar y controlar los factores de riesgo que puedan ocasionar accidentes de trabajo.
Un accidente de trabajo puede definirse técnicamente como “todo suceso anormal no querido, no deseado y no programado, que se presenta de forma inesperada (aunque normalmente es evitable) que interrumpe la continuidad del trabajo y que puede causar lesiones a los trabajadores” (Rosas-Marcano, 2007:156).
Los estudiosos de la Seguridad Laboral consideran que las causas de los accidentes de trabajo pueden agruparse en dos categorías: condiciones inseguras y actos inseguros.
Las condiciones inseguras son de naturaleza ambiental y pueden definirse como cualquier condición del ambiente laboral que puede contribuir a la ocurrencia de un accidente: instalaciones, maquinarias, equipos, herramientas y mobiliario que no están en condiciones de ser usados para realizar (en o con ellas) el trabajo para el cual fueron diseñados.
Enrre las condiciones inseguras más frecuentes se encuentran: escaleras sin pasamanos, conexiones eléctricas sin protección, pasillos y puertas obstruidas; pisos en malas condiciones, deficiente ventilación (que permite acumulación de gases), herramientas en mal estado, suciedad y desorden en el área de trabajo y maquinarias sin cubiertas.
Los actos inseguros son de origen humano y pueden ser definidos como cualquier Pág. 1/4 Elaboración, diseño y montaje por: Romero & Romero Consultores, C.A. acción o falta de acción de la persona que trabaja que puede llevar a la ocurrencia de un accidente.
Los siguientes son actos inseguros muy frecuentes en el ámbito laboral: operar equipos sin autorización y/o sin previo adiestramiento, ejecutar el trabajo a velocidad no indicada, bloquear o quitar dispositivos de seguridad, hacer mantenimiento de maquinarias en movimiento, hacer caso omiso a las normas de seguridad y no utilizar adecuadamente los equipos de protección personal.
Los trabajadores usualmente incurren en actos inseguros por no saber (inexperiencia, falta de destreza, improvisación), por no poder (por limitación visual o auditiva, por fatiga) o por no querer (falta de motivación resistencia a cambiar hábitos…).
Un empleador responsable debe entonces, por un lado, monitorear permanentemente instalaciones, maquinarias, equipos y herramientas para garantizar su buen estado y funcionalidad; y por el otro, promover acciones formativas e incentivos para estimular el comportamiento seguro y responsable de los trabajadores.
----------------------
Rosas-Marcano, A. “Aspectos médicos del accidente de trabajo”, en Castillo-Serrano, M. (2007). Legislación en Prevención, seguridad y Salud Laboral. Barquisimeto: Pitágoras)
diferente, que bien pudo haberse utilizado para otra actividad.
Así que administrar el tiempo es organizar nuestras actividades diarias para atender los asuntos realmente importantes, es decir, las que conducen al logro de los objetivos organizacionales y personales de carácter prioritario. Ello permite
llevar una vida más plena y rica. ¿Cuántas veces hemos deseado que el día tenga más de 24 horas para poder atender nuestras obligaciones? ¿Cuántas veces no hemos pospuesto la lectura de un buen libro, un paseo familiar, la asistencia a algún evento porque no tenemos tiempo? Una buena gestión del tiempo permite conciliar la vida laboral y la vida familiar. Sobre la administración del tiempo se ha escrito mucho en los últimos tiempos, sin embargo, la mayoría de los autores coinciden en algunas recomendaciones generales: Analizar la forma como actualmente utilizamos el tiempo, para conocer en qué lo invertimos y descubrir patrones de conducta que pueden limitar el uso efectivo de tan valioso recurso.Establecer prioridades en función de la importancia de los objetivos que tengamos por delante y traducir esos objetivos en actividades concretas.
Utilizar herramientas que permitan asignar a esas actividades un tiempo específico y predeterminado de realización (agendas, planificadores…)Planificar las contingencias. Aunque parezca paradójico, en función de la experiencia se puede prever eventuales contingencias para las cuales se debe tener respuestas a la mano y cierto margen de tiempo para atenderlas.
Evitar asumir tareas de otros y delegar en otros la realización de actividades para las cuales han sido capacitado, de tal forma que pueda uno centrarse en aquellas que son prácticamente indelegables y evitar la sobrecarga de tareas.Controlar los “ladrones de tiempo”. Establecer filtros para las interrupciones (llamadas no planificadas, visitas inesperadas, reuniones no programadas, actividades no previstas), de tal forma que se pueda atender a las que realmente sean importantes.
Reservar tiempo personal, de tal forma que el individuo pueda lograr un equilibrio entre sus responsabilidades laborales y su vida familiar y social. Hay numerosas técnicas para materializar estos planteamientos. Esas herramientas permiten romper hábitos desperdiciadores de tiempo y establecer nuevos hábitos para hacer un uso eficiente del mismo.Sección: Misceláneas Organizacionales
"... SOBRE EL TIEMPO"
“Administre su tiempo eficazmente“ (2004. Barcelona: Gestión 2000) es un pequeño manual escrito por Robert Hochheiser, contentivo de agudas observaciones sobre la forma como habitualmente utilizamos el tiempo y lleno de sugerencias para hacer un uso más eficaz de tan valioso recurso. De ese texto hemos extraído algunas afirmaciones que dejamos para la reflexión y discusión de nuestros lectores.
”Si no obtiene el máximo partido de una hora, o incluso de un minuto, no tendrá una segunda
oportunidad para volver a hacerlo. Es posible que sea capaz de intentar otra vez lo que pretendía, pero no en el mismo lapso de tiempo. Éste ya forma parte del pasado y desapareció para siempre”
“Sin fuerzas suficientemente grandes y bien armadas, ni siquiera los grandes militares ganan batallas. De manera similar, su estrategia de gestión del tiempo tiene que ser brillante, pero fracasará si no incluye la oportuna motivación de las personas adecuadas”
“La mejor manera de lograr un equipo fiable consiste en encontrar y contratar a las personas más capacitadas que puede permitirse y explicarle claramente lo que espera de ellas. Después, hágas a un lado y deje que cumplan su trabajo”
“No ganará tiempo si asigna unas tareas a los demás y luego se dedica a observarlos, desconfiando de su comportamiento
“Controlar el tiempo significa muchísimo más que ir a la carrera. Implica ser capaz de parar cuando uno desea detenerse, relajarse, charlar -incluso contemplar el ocaso si eso es lo que desea y conseguir además que todo se haga cuando estaba previsto”.
“La mayoría de los problemas de control de tiempo se producen porque, al estar bajo presión las personas no piensan lógicamente”
“El hecho de que pueda hacer algo ahora no significa que tenga que hacerlo ya. Cuando son muchas las tareas que se han de realizar y el tiempo es escaso, no debe hacer nada que no sea atender al cumplimiento de sus objetivos más acuciantes.”
“Todas las tareas y todos los proyectos no tienen la misma importancia. En consecuencia, el lema ‘lo primero es lo primero’ es la esencia de una buena gestión del tiempo”
.
Sección: Al día con la LOPCYMATLA LOPCYMAT: ACCIDENTE DE TRABAJO Y ENFERMEDAD OCUPACIONALLa LOPCYMAT ofrece una definición amplia de accidente de trabajo, extendiendo el concepto a otras actividades que el trabajador realice aún cuando no estén directamente relacionadas con la ejecución de sus tareas.
En efecto, el artículo 69 establece:
“Se entiende por accidente de trabajo, todo suceso que produzca en el trabajador o la trabajadora una lesión funcional o corporal, permanente o temporal, inmediata o posterior, o la muerte, resultante de una acción que pueda ser determinada o sobrevenida en el curso del trabajo, por el hecho o con ocasión del trabajo”.
De inmediato, el artículo 69 en su numeral 1, incluye en el concepto de accidentes de trabajo las lesiones provenientes de esfuerzos violentos o exposición a otros agentes. Se considera, por tanto, accidente de trabajo:
1. La lesión interna determinada por un esfuerzo violento o producto de la exposición a agentes físicos, mecánicos, químicos, biológicos, psicosociales, condiciones metereológicas sobrevenidos en las mismas circunstancias.
Los numerales 2; 3 y 4 amplían el concepto para abarcar eventos acaecidos durante el desarrollo de labores de salvamento, el traslado del trabajador a sus centro de labores, o en el cumplimiento De sus responsabilidades sindicales. Por tanto, también son accidentes de trabajo:
2. Los accidentes acaecidos en actos de salvamento y en otros de naturaleza análoga, cuando tengan relación con el trabajo.
3. Los accidentes que sufra el trabajador o la trabajadora en el trayecto hacia y desde su centro de trabajo, siempre que ocurra durante el recorrido habitual, salvo que haya sido necesario realizar otro recorrido por motivos que no le sean imputables al trabajador o la trabajadora, y exista concordancia cronológica y topográfica en el recorrido.
4. Los accidentes que sufra el trabajador o la trabajadora con ocasión del desempeño de cargos electivos en organizaciones sindicales, así como los ocurridos al ir o volver del lugar donde se ejerciten funciones propias de dichos cargos, siempre que concurran los requisitos de concordancia cronológica y topográfica exigidos en el numeral anterior.
En el artículo 70, la ley define las enfermedades ocupacionales, las cuales, contrariamente a los accidentes de trabajo que se presentan en forma brusca e imprevista, representan un deterioro gradual de la salud por exposición a diversos tipos de agentes:
Se entiende por enfermedad ocupacional, los estados patológicos contraídos o agravados con ocasión del trabajo o exposición al medio en el que el trabajador o la trabajadora se encuentra obligado a trabajar, tales como los imputables a la acción de agentes físicos y mecánicos, condiciones disergonómicas, meteorológicas, agentes químicos, biológicos, factores psicosociales y emocionales, que se manifiesten por una lesión orgánica, trastornos enzimáticos o bioquímicos, trastornos funcionales o desequilibrio mental, temporales o permanentes.
De inmediato, el artículo aclara:
Se presumirá el carácter ocupacional de aquellos estados patológicos incluidos en la lista de enfermedades ocupacionales establecidas en las normas técnicas de la presente Ley, y las que en lo sucesivo se añadieren en revisiones periódicas realizadas por el Ministerio con competencia en materia de seguridad y salud en el trabajo conjuntamente con el Ministerio con competencia en materia de salud.